-Ahora muévete pa' la izquierda. Pon morritos. Enfádate. Apoya las manos en los lumbares como si fueras a parir de un momento a otro. O como si hubieras hecho abdominales durante ocho horas. Mírame como si fuera el director del gimnasio y te hubiera obligado a hacer pesas 8horas, ¡eso sí! Me gusta esa cara de cabreo. Esa pose chula. Qué arte. Oye, ¿qué estás haciendo? Porqué te metes la mano en el escote? Pero, ¿DE DÓNDE HAS SACADO ESE CUCHILLO, WARRA?
-Voy a matarte, director de gimnasio de mierda....
(me imagino la situación. Soy muy así).